PEGGY GUGGENHEIM, CONFESIONES DE UNA ADICTA AL ARTE: EL ESQUELETO DE UN TREPIDANTE TRAVELLING VITAL
El tiempo pasa a gran velocidad y, más, si no nos paramos a contemplarlo. Algo que, por ejemplo, le ocurrió a Peggy Guggenheim tal y como nos narra en este recorrido por el mun
RICARDO MARTÍNEZ-CONDE, VA AMANECIENDO: EL SILENCIO, UNA FORMA DE HABITAR EL MUNDO
El universo, aquel que va desde la Tierra al cielo o desde la luna al infinito, se congela cuando en él reina el silencio, pues no hay una mejor forma de habitar el mundo. Aquel q
PAUL AUSTER, BAUMGARTNER: LA SOLEDAD DEL TIEMPO
El tiempo, en ocasiones, se convierte en una balsa sobre la que flotar a través de los recuerdos. El pasado visto de esta forma es un remansiño de paz que busca lo que otrora n
KENZABURO OÉ, LA PRESA: ADOLESCENCIA, LIBERTAD Y MUERTE
El ansia de exploración en la adolescencia es el mayor aliado de las nuevas experiencias. Figuras virtuales que, cuando traspasan la mera anécdota, se convierten en trágicas en
LORRIE MOORE, SI ESTE NO ES MI HOGAR, NO TENGO HOGAR: MISTERIOS INCONEXOS Y SIN SENTIDO
De la cultura que nos asola y, a su vez presume de manifestar un extremo buenismo hacia todo aquello que le rodea, nace esa ridícula necesidad de demostrar continuamente una empat
MARGUERITE DURAS, EL AMANTE DE LA CHINA DEL NORTE: LA POLIFONÍA DE LOS ECOS DEL AMOR A TRAVÉS DE LOS RECUERDOS
La vida va y viene, y en ese tobogán de idas y venidas, días y estaciones, el tiempo nos trae otras vidas, otros recuerdos que estaban dentro de nosotros para llegado el momento
BILL VIOLA (1951-2024): EL ARTISTA QUE CONVIRTIÓ EL VIDEO-ARTE EN PURO SENTIMIENTO
En un mundo gobernado por las imágenes no cabe un mayor reto que hacer de ellas no sólo un mero escaparate de vivencias, vacuas la mayoría de ellas y sin ningún interés para e
ANGÉLICA LIDDELL, DÄMON, EL FUNERAL DE BERGMAN: RESONANCIAS ALREDEDOR DE LA MUERTE
¿Qué hay más vulnerable que mostrarnos desnudos ante los demás? En este caso, no se trata de hacerlo por puro exhibicionismo, sino con la intención de arrancarnos el corazón